Exposición: Antiel Jiménez

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 PRINCESSXBANANAS

Exposición: Octubre en el Ambigú de El Umbral de Primavera

 

Persiguiendo un conejo blanco.

Siendo una liebre de marzo.

Encontrando tus múltiples personalidades en un Tinder de recortes desgastados.

Recrearte tus lugares de distensión.

Pantones descascarillados, recuerdos en baja definición.

Esperando encontrar algo que te remueva lo más profundo comiendo plátanos.

Construir recuerdos falsos a través de emociones secretas.

Intentando ser una princesa disfrazada con una máscara de concupiscencia.

Nombres de varón y curriculums con zurraspas de poesía.

Mezclar tus propias experiencias con ficciones encontradas el cualquier rincón del mundo.

Ponerle banda sonora recitada a lo que crees que estás viviendo.

Dejar constancia de cómo te toca el mundo, de lo que no sientes y encontrarte perdido entre los cientos de letras en una imagen redactada.

Cayendo en el hoyo del tiempo con la mala suerte de haberle visto las orejas al conejo.

Mientras pasa la vida, y mientras busco quien soy, y mientras espero que alguien se acerque a robarme de verdad el corazón; como BANANAS.

 

 

 

 

1Antiel Jimenéz nace, vive y se reproduce.

Se está criando en el arte hasta donde su pobre cabecita le permite y hasta que sus circunstancias se lo impidan.

Pasa por la Historia del Arte y se establece en la Escenografía, donde lo que más aprende es a deshacerse de su creatividad y a formar con ella su más preciada arma.

Intenta hablar del amor y de la muerte, pero no sabe si lo consigue. No quiere mostrar una realidad, porque cada uno tiene la suya. No busca cambiar nada, sólo intenta encontrar a otros que puedan compartir su gran devoción por la sensibilidad y lo bello. Suena pedante, y puede parecerlo, pero se distraía tanto en el colegio que no sabe lo que significa, como otras tantas palabras.

Se ayuda de la gente, del trabajo de campo, de los surrealistas, del pop, del arte menos artístico, de la instalación, de los griegos, de la biblia y de su gran amor: EL TEATRO.

Se pierde en las disciplinas escénicas y desaparece. Ilumina, desviste y monta lo que le dejan, y crea a partir de los recortes que le ofrece el mundo para hacer el collage de lo que es su propia visión artística. No huye de lo mainstream, ni de lo underground, ni del art brut, aunque tampoco es ninguna de esas cosas en concreto.  No se atiene a las normas técnicas ni artísticas, de hecho no se acuerda.

Podría ser un punk victoriano o un dandi o un niño con una máscara de conejo sucia.

 

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